El 2021 inició con elecciones en el estado de Georgia en Estados Unidos, donde el pasado 5 de enero se efectuó la segunda vuelta para dos senadurías. Esta votación, fue solo la primera de 78 elecciones que se realizarán en 64 naciones a lo largo del año, según el registro que lleva la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (IFES).
El abultado cronograma electoral de los próximos 12 meses refleja que aunque la pandemia por COVID-19 trastocó el calendario de 2020, las naciones intentarán hacer frente al coronavirus para no lesionar los derechos políticos y la democracia durante el presente año, pero en muchos casos, las medidas para resguardar la salud lucen insuficientes, pues se remiten al distanciamiento de seguridad, uso de alcohol gel y mascarillas, cuando la tecnología fue, por mucho, la mejor alternativa en variadas naciones el año pasado.
De los 78 procesos electorales que se preparan para elegir presidentes, congresos o autoridades regionales y locales por todo el planeta, África y Europa concentran la mayor cantidad, pues 19 países del primero y 16 del segundo adelantarán votaciones. En América serán 14 los territorios con comicios en 2021, mientras en Asia serán 13 y en Oceanía tres.
La IFE destaca que durante el año pasado, producto de la pandemia, se «revitalizó el debate en torno a métodos alternativos de votación«, como es el caso del sufragio postal, en el que las boletas se entregan en el hogar de los electores y luego estos las devuelven por correo o en persona.
También la tecnología electoral fue una aliada para diversos países que fortalecieron las medidas para salvaguardar la voluntad popular y la salud de los votantes. El sufragio electrónico y el voto en línea se establecieron como las mejores alternativas para brindar estas garantías. Algunos ejemplos fueron Brasil, diversos condados de Estados Unidos y Singapur, donde el uso de la tecnología electoral adaptada a las características del país o región optimizó el proceso de votación; y ofreció seguridad al voto, y alternativas para resguardar la salud de las personas.
Atendiendo las experiencias exitosas en 2020, y en vista que los efectos de la pandemia seguirán latentes en 2021, el calendario electoral será una nueva oportunidad para implementar los mejores y más seguros modelos para sufragar. La necesidad de proteger la voluntad popular, y ahora también la salud, puede motivar a las autoridades a acercarse a la tecnología para seguir votando seguros y confiados.
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