TSE de Guatemala da un paso atrás en transparencia electoral


El Tribunal Superior Electoral de Guatemala cedió ante las campañas de desinformación y prefirió dar un paso atrás. Hace pocas horas, y por segunda vez en menos de tres meses, desestimó tres concursos públicos para modernizar sus elecciones. Según su magistrada presidenta, Irma Palencia, “se van a reformular las bases del concurso”.

A partir de las elecciones de 2019, el Tribunal Superior Electoral de Guatemala había decidido modernizar su sistema para el procesamiento de resultados preliminares. El TSE requería -y requiere- un sistema robusto que permita dar resultados confiables la misma noche de la elección, siguiendo las mejores prácticas de transparencia electoral.

Los organismos de observación electoral que estuvieron monitoreando las elecciones de 2019 coincidieron que los problemas en el sistema de carga de actas -específicamente el acta #4- abrían la puerta para la manipulación electoral, y sobre todo, podían generar dudas en los partidos políticos y la sociedad civil.

Según el reporte del Instituto Republicano Internacional (IRI, por sus siglas en inglés), en las elecciones de 2019 se encendieron alarmas al cotejar la imagen de actas generadas en algunas Juntas Receptoras del Voto versus las actas publicadas en la página del TSE, “algunas actas no coincidían (…) y los partidos políticos iniciaron un llamado enérgico al TSE para responder sobre esta situación”.

Por su parte, en esas mismas elecciones de 2019, la Organización de Estados Americanos (OEA) atribuyó las causas de la demora en la entrega de resultados preliminares a las deficiencias del software para procesar las actas: desde inconvenientes para acceder al sistema y transmitir el acta desde los centros de votación; la incapacidad para soportar la carga de actas de manera simultánea; hasta un número de candidatos muy superior al que el software permite. En su informe, la misión de la OEA recomienda a las autoridades modernizar este sistema que se viene usando desde las elecciones de 2011.

A pesar de que los organismos de observación electoral dejaron en claro la necesidad de mejoras y actualizaciones, el TSE no soportó la presión de las campañas de desinformación. Durante las últimas semanas, por desconocimiento o por intereses ocultos, políticos y representantes de organizaciones civiles se dedicaron a sembrar desconfianza en las próximas elecciones y en el TSE como su ente administrador. Esto sienta un precedente muy peligroso.

Tras la campaña de desinformación en las elecciones de Brasil, diversos sectores en Guatemala aprovecharon para desinformar sobre un supuesto uso de máquinas de votación en sus próximas elecciones. El voto en Guatemala es manual y seguiría siendo manual. Ninguno de los concursos que realizaba el TSE es para la implementación de voto electrónico. Las soluciones tecnológicas con las que el TSE aspira modernizar las elecciones, son para dos procesos específicos: validación de la identidad de los electores de forma biométrica; y digitalización y transmisión de actas para el rápido procesamiento de resultados preliminares.

Los votos se seguirían contando tal cual se cuentan en las elecciones de Guatemala, de forma manual, por los miembros de las JRV y en presencia de los fiscales. La tecnología para la digitalización y transmisión de actas no pretendía sustituir este proceso tradicional, más bien la tecnología permitiría crear un registro auditable para fortalecer la integridad de la elección, ya que todas las actas serían publicadas, y los partidos políticos podrían comparar en tiempo real sus copias versus las actas publicadas.

Con respecto a la verificación del elector, esta es la fase de una elección donde más comisiones electorales de la región y del mundo están invirtiendo. Países con alta incidencia de acarreo de votantes, voto múltiple, o con muertos que supuestamente votan, se benefician con su implementación. Además, con estos dispositivos específicamente diseñados para elecciones, el trabajo de los miembros de mesa se hace más eficiente y las autoridades electorales pueden acceder a información en tiempo real sobre el despliegue, información que puedan compartir con la sociedad civil y los partidos políticos.

El TSE de Guatemala no está solo en este camino de la modernización. Al contrario, va detrás de muchos países de la región que ya implementan una o ambas tecnologías en sus elecciones: Colombia, Argentina, Bolivia, Paraguay, Honduras, Panamá, Brasil y México.

Un pensamiento en “TSE de Guatemala da un paso atrás en transparencia electoral

  1. Pingback: Elecciones de 2023 en Latinoamérica - Decoding The Vote

Deja un comentario