La pandemia global por Covid-19 ha tomado un nuevo aire. En muchas partes del mundo se está haciendo frente a los efectos de esta ola, incluida Latinoamérica, pero al menos en esta última región no se detendrá el calendario electoral previsto para el segundo trimestre del año.
La programación de la región dicta que son cuatro países los que votarán entre abril y junio, y aunque todos usarán varias herramientas tecnológicas en algunas de las etapas de la votación, la realidad es que solo uno dispondrá de voto electrónico, al menos parcialmente, para mitigar todos los riesgos de contagio, estimular la participación y preservar la voluntad del electorado.
Súper domingo
Tres de las cuatro naciones que votarán en los próximos tres meses, coincidirán en las urnas el 11 de abril.
Ecuador, que cumplirá la segunda vuelta presidencial, asistirá a la cita comicial con un mal precedente: en las elecciones del pasado 7 de febrero el país debió esperar dos semanas por los resultados definitivos, ya que las principales falencias del voto y conteo manual ocurrieron en esa jornada, el retardo en la entrega del escrutinio, la manipulación de actas y las inconsistencias, lo que impidió que el resultado cerrado pudiera ser declarado cómo valido de manera oportuna. Para este 11 de abril repetirá el modelo de votación manual y el uso de escáneres ópticos para digitalizar las actas y agilizar la difusión de los resultados preliminares.
Chile es el segundo país que también votará el 11 de abril. Realizará las municipales y regionales, así como la elección de los integrantes de la Convención Constitucional. Las autoridades se muestran confiadas de llevar adelante la elección de forma segura, y usando el tradicional sufragio manual con el que cuenta esta nación. Como se recordará, el uso de voto electrónico fue descartado tanto para el plebiscito del año pasado, como para estos comicios y las presidenciales de octubre próximo.
El súper domingo del 11 de abril lo completa Perú. Esta nación, luego de años convulsos con cuatro vacancias presidenciales, la disolución del congreso, la renuncia de un presidente y cuatro mandatarios, realizará las elecciones generales que buscan recomponer las fuerzas políticas, pero en las que el organismo electoral optó por frenar el avance del voto electrónico que ha usado en múltiples elecciones en casi 40 circuitos.
Automatización parcial
El ciclo del segundo trimestre del año lo cerrará México, que volverá a votar el 6 de junio en las elecciones más grandes de su historia, porque se elegirán 500 diputados del Congreso y 21.383 cargos entre gobernaciones, ayuntamientos y alcaldías en los 32 estados del país. Esta nación estrenará voto por internet para sus nacionales en el extranjero, y probará modelos automatizados en Jalisco y Coahuila, en la idea de amplificar su uso de manera progresiva en todo el país.
De estas cuatro naciones, solo México empleará tecnología para votar y contar sufragios de manera parcial, evidenciando que la región sigue rezada en la modernización de sus sistemas de votación.
Sobre los cuidados para la pandemia, todos se apegarán, principalmente, a las recomendaciones de usar mascarilla y distanciamiento social, así como que los electores lleven su lapicero, asistan en diversas franjas horarias para evitar aglomeraciones, y en la medida de las posibilidades usar alcohol para frenar el contagio.
Voto digital 